Existen multitud de efectos que pueden aplicarse a las imágenes mediante técnicas que las distorsionan de forma más o menos controlada.
Uno de los más utilizados es el denominado “efecto Warp” que permite, manteniendo la información de iluminación y color, generar animaciones de un fotograma fijo.
Veamos de forma práctica este efecto.
Para introducir este concepto de tratamiento gráfico veremos un ejemplo de deformación parcial de una imagen, realizado con FotoMorph sobre la oreja de un personaje de animación que incorpora el software para animación Blender, que hemos utilizado en las ilustraciones y tutoriales del blog.
Nos referimos al objeto en forma de malla de ejemplo denominada “Monkey”.
La distorsión de la imagen se puede realizar de diferentes maneras. En este ejemplo usaremos un conjunto de puntos de control como los siguientes.
Estos puntos de control pueden moverse para determinar su movimiento en la deformación, warp, del modelo. El sistema los desplazará desde la posición inicial a la final de forma contínua en el intervalo de tiempo que fijemos.
Hemos desplazado únicamente los pintos correspondientes al borde de la oreja del modelo, manteniendo el resto de elementos de control en su posición original. El resultado de la deformación al completar el ciclo de animación será el siguiente:
Si invertimos el ciclo de animación y lo añadimos como una secuencia al inicial, obtendremos algo similar a:
Como se ve es un efecto sencillo de generar, ya que se basa únicamente en la modificación de un conjunto de puntos de control que lo guían.
¿Te parece interesante el efecto?
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