Una serie de animaciones cortas dotadas de personalidad propia son un recurso de “relleno” utilizado en muchas cadenas de televisión comercial.
Estos cortos de una duración inferior al minuto servían de caretas de cambio de programación, completando los bloques asignados a cada franja horaria.
Una pincelada de humor !
El guión en estos casos predomina sobre la espectacularidad de la imagen. Los escenarios son simples pero contienen los suficientes elementos que definen el espacio escénico, objetos cuidadosamente elegidos con fuerte simbolismo.
Abre la serie “River Dance” con uno de mis personajes favoritos.
Técnicamente junto al movimiento del personaje, el único efecto necesario es un pequeño sistema de partículas que aparece al mover los pies. La música guía con ritmo la situación “dadaista” del personaje en ese baile tan personal, en ese escenario tan “personal”.
Twisted Whiskers River Dance
Cada episodio puede incorporar uno o dos personajes en general. No da tiempo en medio minuto a mucho más. Planos medios o y primeros planos para captar expresiones o gestos con distorsión como elemento de humor. Situaciones inverosímiles e inconclusas en ocasiones, que ya cerrará el espectador.
Twisted Whiskers Balloon Dog
Los cortos juegan al despiste sin dar concesiones al espectador. La sorpresa, lo paradójico se normaliza con un fuerte dramatismo implicando personalmente con una gran complicidad al que comparte pantalla. Gestos dirigidos y expresiones en las que el espectador se convierte en actor.
Twisted Whiskers Toilet Kitty
El conjunto sitúa a unos personajes y sus relaciones sociales. Parodia en parte a las personas y saca en forma humorísticamente lo más sádico de cada uno de ellos.
Twisted Whiskers Get Jiggy With It
E incluso juega con la humanización del personaje contrastándola con su componente animal, en una ambigüedad calculada.
O éste otro:
Twisted Whiskers Ruff Road
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Entrada publicada originalmente en el blog educativo igweb.eiae.upm.es
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